El funcionamiento de los compresores de pistón o de tornillo está basado en el principio de la compresión por el desplazamiento. Por ello, en este post te explicaremos los principales tipos que existen, sus características más importantes y todas las ventajas que pueden ofrecerte.
Compresores de pistón: Características, funcionamiento y ventajas
Las características de los compresores de pistón son los cilindros y los pistones. Estas piezas están formadas por un émbolo y un vástago. Mientras se desplazan a través de un cilindro, pueden reducir el volumen de gas y aumentar su presión. El pistón se mueve gracias a la acción de una unidad de potencia, junto con una biela y un cigüeñal. Este tipo de compresores también pueden ser de efecto simple o doble. ¿Cuál es la diferencia entre ellos? Básicamente, que en los simples solo comprimen el aire cuando se mueven en una dirección concreta. En cambio, en los de doble efecto, el pistón actúa cuando se mueve en ambas direcciones.
Asimismo, los compresores de pistón pueden actuar tanto en una como en dos etapas. En el caso de que sean de una sola etapa, siempre proceden de la misma forma. Por su parte, los de dos etapas funcionan siguiendo dos fases. Inicialmente, el aire se comprime en unos cilindros de baja presión antes de desplazarse hacia otro cilindro, donde se comprime en alta presión. Este tipo de compresores pueden utilizar aceite para reducir la fricción de las piezas a modo de lubricante. También se pueden usar otros tipos de materiales, como el teflón o el carbono.

Puedes encontrar diferentes tipos de configuración. Una de las más comunes es la que se conoce como forma de V, especialmente empleada en los compresores que tienen un pistón pequeño. La única excepción se encuentra en los modelos más básicos de los cilindros verticales. En cambio, en aquellos compresores de mayores dimensiones, la configuración en forma de L es la que ofrece mayores ventajas.
El funcionamiento de este tipo de compresores se activa mediante un sistema de válvulas con dos discos de acero inoxidable. Cuando el pistón se mueve hacia abajo, el disco de mayores dimensiones se dobla y abre la puerta para que entre aire en el interior del cilindro. En cambio, cuando el pistón se mueve hacia arriba, el disco grande se dobla en el sentido opuesto, lo que impide la entrada de aire en el cilindro. Sin embargo, el disco más pequeño, que cuenta con una mayor flexibilidad, sí permite pasar el aire a través del orificio de la válvula.
Los principales beneficios que te ofrecen los compresores en forma de pistón son su gran vida útil, especialmente por los materiales de alta calidad, y la resistencia a la fricción. La capacidad de compresión es mucho más adaptable en función de la cantidad de los cilindros. También se ajusta al tipo de uso y al proceso industrial correspondiente según tus necesidades.
Compresores de tornillo: Características, funcionamiento y ventajas
Los compresores de pistón son los más tradicionales y empezaron a usarse a lo largo de la Revolución Industrial. En cambio, los compresores de tornillo se hicieron populares a lo largo del siglo siguiente. Fue en torno a la década de 1930 cuando surgió una gran necesidad de utilizar el aire comprimido.
Las características de los compresores de tornillo incluyen la presencia de varios engranajes de sincronización. En este tipo de compresor, los tornillos nunca entran en contacto y es el engranaje el encargado de conseguir que los diferentes mecanismos giren. El separador tiene la función de mantener los tornillos separados. Cuenta con un eje principal del rotor en forma de rodamiento, y también con unos piñones que ayudan a que todo el sistema pueda desplazarse con total normalidad.
Su canal refrigerante, por otra parte, tiene la capacidad de mantener la temperatura totalmente estable. Junto con el orificio de ventilación, evita las posibles subidas y bajadas de temperatura que se puedan producir. El pistón de equilibrio tiene la función de mantener los ejes a la misma distancia, mientras que, a través del puerto de salida, junto con el orificio de drenaje, se permite la expulsión de sus fluidos.

El funcionamiento de los compresores de tornillo está basado en una máquina que, con la ayuda de dos tornillos, es capaz de comprimir el aire. A través de una polea, el motor puede transmitir energía mecánica al depósito del compresor. Cuando los tornillos están llevando a cabo su movimiento de rotación, son capaces de crear un tipo de succión en su toma de aire. A lo largo de este proceso, se va aumentando la presión gracias a las cavidades. El aire se almacena en un depósito que llena el interior del compresor.
A diferencia de los compresores más tradicionales, una de las ventajas principales, a la hora de apostar por los de tornillo, es que presentan un mejor funcionamiento gracias al uso de elementos rotativos de menor tamaño. De esta forma, se evitan las vibraciones y la fricción que provocan los pistones, con lo que se obtiene una mayor eficiencia mecánica. Su durabilidad también es mucho mayor que la de los compresores de pistón. El nivel de aceite que necesita, en comparación con otros tipos de compresores, es mucho menor, por lo que podrás reducir tus costes.
Otros tipos de compresores
Existen otros tipos de compresores que, pese a que son menos comunes, no debes perder de vista. Unos de los más comunes son los compresores a batería, que podrás usar en cualquier lugar. En cambio, otro de los mejores, de tipo rotativo, son los compresores scroll o de paletas. Los compresores dinámicos o centrífugos pueden serte de utilidad para cumplir tus objetivos.
Como conclusión, es de vital importancia conocer el funcionamiento de los compresores de pistón, de los de tornillo y de otros tipos más secundarios si deseas cumplir todos tus procesos industriales. En Sebastián Salazar contamos con una amplia gama de compresores de uso industrial y con un equipo de profesionales cualificados que podrá ayudarte a encontrar el producto que mejor se adapte a tus necesidades. Ponte en contacto con nosotros y descubre toda la información que necesitas.
0 comentarios